La piscina olímpica de Naiguatá requiere urgentemente de atención gubernamental, pues tiene la bomba dañada, producto de las fluctuaciones eléctricas y no hay recursos suficientes para su recuperación.
Así lo señalaron los vecinos, quienes manifestaron que mantenerla es costoso. «Necesitamos el apoyo del gobernador José Alejandro Terán. Son $2 mensuales que cobramos por su uso a cada atleta, pero lo recolectado no es suficiente para el mantenimiento total».
Detallaron que ese monto mensual se debe a que la mayoría de los deportistas son de bajos recursos. «Cada vez que hace falta un repuesto, acá casi lloramos. Si al menos nos apoyaran en los gatos de los químicos, usaríamos los fondos de la mensualidad solo para repuestos»./JAM/jd