Icono del sitio Diario La Verdad de Vargas

Piden prueba de ADN para bebé de niña en Paraguay

La Fiscalía paraguaya solicitó extraer muestras de ADN a una bebé nacida hace dos semanas para comprobar si la madre, de 11 años, fue violada por su padrastro y quedó así embarazada, dijo hoy a Efe la fiscal del caso, Monalisa Muñoz.

Esta pericia permitirá comprobar o descartar el parentesco del padrastro con la recién nacida y servirá como prueba en la investigación por supuestos abusos sexuales contra su hijastra, identificada por el apodo de “Mainumby”, explicó Muñoz.

No obstante, la fiscal aseguró que “todas las pericias realizadas hasta el momento son concluyentes y apuntan al padrastro como presunto autor de la agresión sexual en el grado cuatro, que es el más grave, porque incluye el coito”.

Entre estas pruebas se encuentran los testimonios de los familiares de la víctima y del presunto agresor, y las pericias psicológicas, aunque el plazo de investigación estará abierto hasta octubre, cuando se realizará la audiencia preliminar al acusado.

Mientras tanto, el presunto violador se encuentra en prisión preventiva en la penitenciaría de Tacumbú, en Asunción, dado que el nivel de gravedad de los abusos impide que se puedan disponer medidas cautelares con libertad ambulatoria, refirió Muñoz.

La progenitora de la niña-madre, en cambio, sí goza de libertad ambulatoria, después de haber pasado varias semanas recluida en la prisión de mujeres del Buen Pastor, acusada de un presunto delito de abusos sexuales en grado de complicidad.

“La acusación por cómplice de abusos sexuales contra la madre de la menor se desvaneció, pero continúa vigente la imputación por violación del deber de cuidado, que también deberá examinarse en octubre”, puntualizó la fiscal.

La madre fue beneficiada con medidas alternativas a la prisión para que pudiera acompañar la etapa final del embarazo de su hija y el parto, y asumir la tutela tanto de la niña de 11 años como de la recién nacida.

Muñoz explicó que, dado que la mujer continúa imputada por falta de cuidado, el Juzgado de la Niñez y de la Adolescencia deberá pronunciarse acerca de si es la persona idónea para tener la custodia de su hija y de la bebé de ésta.

Agregó que tanto la niña de 11 años como la recién nacida fueron dadas de alta y se encuentran en casa, donde “Mainumby” recibe asistencia psicológica y atención médica.

El caso de la niña Mainumby puso de manifiesto en los medios de comunicación y en la opinión pública de Paraguay la realidad de los abusos sexuales contra menores, y suscitó preocupación a nivel internacional.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) instó a Paraguay a que impusiera medidas cautelares para proteger la vida de la menor, dado que su embarazo, considerado de alto riesgo por su corta edad, “podría vulnerar su derecho a la vida y a su integridad personal, física y psicológica”.

El Estado paraguayo rechazó la imposición de medidas cautelares y argumentó que ya habían sido adoptadas “todas las medidas para evitar la impunidad de este hecho ilícito (la violación de la menor) y garantizar la vida e integridad de la niña embarazada y el prenatal”.

Un total de 421 niños y adolescentes fueron víctimas de abusos sexuales en Paraguay entre enero y junio de 2015, según los últimos datos oficiales.

En 2014, 684 niñas entre 10 y 14 años y 20.009 adolescentes de edades entre 15 y 19 años dieron a luz bebés vivos en el país.

Salir de la versión móvil