Maromas hacen los vecinos de los sectores La Gallera y La Sirena para pasar de un lugar a otro y es que las caminerías están colapsadas, por lo que se requieren de una pasarela.
El pasadizo se convirtió en un abismo y representa un peligro para quienes habitan en la comunidad. “Estamos cansados de denunciar la situación ante los entes gubernamentales y no hemos tenido respuesta”, indicó Teresa López.
Resaltó que varias personas se han caído y hay que tomar medidas antes de que ocurra algo peor. Reiteraron su llamado tanto al gobernador José Alejandro Terán como al alcalde José Manuel Suárez para que busquen soluciones concretas.BR/jd