El líder religioso podría ir a la cárcel como parte de su castigo por haber abusado de un niño en la India en un evento público, cuyo video fue viralizado tras besarlo en los labios y por pedirle que “chupara su lengua”.
El partido de Sudáfrica, Luchadores por la Libertad Económica (EFF, por sus siglas en inglés), condenó el hecho y exigió que el Dalái Lama sea condenado a prisión.
Tras la controversia desatada, la oficina del Dálai Lama expresó este lunes en un comunicado sus «disculpas al niño y a su familia, así como a sus muchos amigos de todo el mundo por el daño que sus palabras han causado».
Sin embargo, para EFF «es revelador que la disculpa se emitiera casi un mes después del deplorable incidente y sólo tras el aumento de la presión por parte de activistas contra el abuso infantil».
Según el partido, «se supone que los líderes religiosos deben ser protectores, no abusadores de los más vulnerables en la sociedad», de modo que «la ley no debe perdonar a ningún líder religioso que cometa actos abusivos».
Lhamo Dondhup, nombre original del decimocuarto Dalái Lama, huyó junto a miles de compatriotas a la India a principios de 1959, tras la dura represión china contra el fallido levantamiento popular de Lhasa, capital del Tíbet.
Desde entonces, continuó la lucha por la libertad de su pueblo, aunque siempre «oponiéndose sistemáticamente a la violencia», motivo por el cual le fue concedido el Nobel de la Paz en 1989.