* Las alzas de las prendas son mensuales y superiores al 50%
María Elena Moreno – Insostenible se ha vuelto vender ropa, para los pequeños comerciantes. Explican que entre las alzas frecuentes y la devaluación del poder adquisitivo del venezolano, vender par de prendas se tradujo en la mejor semana. Sus expectativas para diciembre son muy bajas, igual que las ventas, que han caído en más del 85%.
Henry Ramírez, encargado de inversiones Pomponio en el Mercado Cacique Maiquetía, asegura que por primera vez en más de una década dedicado al rubro no puede abastecer con variedad. “Debo traer lo que pueda, y eso pidiendo créditos que al final se vuelven nada. No es posible que desde enero todo haya subido más de cinco veces”.
Camisas al mayor en Bs. 1.700
Cuenta sorprendido cómo en una bolsa de mano trajo seis camisas por las que pagó 14 mil bolívares. “Además, tengo que comprar lo que hay, pues por la falta de dólares los almacenes están vacíos. Una franela que en enero vendía a 500 bolívares, hoy me cuesta al mayor 1.700. Esta situación es asfixiante”.
Comenta que un presupuesto facturado por proveedores para invertir en un local de ropa está sobre los 614 mil bolívares, por solo 14 docenas de prendas variadas. “Es difícil incluso emprender como comerciante, como su propio jefe, pues la inflación no da chance. Además, ahora ya no aceptan ni cheques”.
“Esta Navidad no me toca estrenar”
Explicó que siguiendo el patrón de alzas, para el mes de diciembre un pantalón de caballero que está en 11 mil bolívares podría costar unos 16 mil, mientras que una camisa sencilla no bajará de seis mil.
Enmanuel Barreto, asegura que con los precios actuales no podrá estrenar este año. “Se gasta todo en comida, soy joven y quiero independizarme, pero con el precio de las cosas no es posible. No me alcanza el dinero ni para los zapatos de fútbol que uso, que están en 30 mil bolívares. Hace más de un año los compré en 600. Ni con dos trabajos es posible comprar ropa, pues el pantalón más barato no baja de siete mil bolívares”. /MEM/ar