Penitencia de 9 horas por gasolina subsidiada
A las bombas solo les surten 9.000 litros de gasolina diarios de los cuales 4.500 son para la subsidiada que no alcanza y 4.500 litros para la dolarizada y sobra gasolina: no hay que hacer cola.
La espera se hace eterna para quienes no tienen para surtir gasolina polarizada y se ven obligados a comprar combustible subsidiado para sus vehículos. Algunos van preparados y llevan sillas, café y hasta juegan una partida de cartas o dominó, puesto que no pierden las esperanzas de, aunque sea, irse con la mitad del tanque lleno.
“Yo me encuentro acá desde las 6 de la mañana y algunos desde las 3, la encargada de la bomba nos dijo que si venderá gasolina subsidiada y que no tendríamos que esperar mucho, pero ya algunos tienen hasta 9 horas en la cola”, aseguró Carlos Baena, quien se encontraba en las adyacencias de la estación de servicio Asís, en el CC El Prado de la Avenida La Atlántida, Catia la Mar.
Aseveran que la mayoría de las estaciones solo cuentan con gasolina a precio internacional, y que la misma es muy costosa, puesto que surtirse a 0,50 dólares el litro no es viable para quienes ganan salario mínimo o un poco más.
“Acá nada es seguro hasta que uno llene el tanque, ya que cualquier cosa puede pasar. Uno hace este sacrificio de perder tiempo, pagar la penitencia que el gobierno le impone a los pobres para todo, para ahorrarse un dinero. No es lo mismo llenar el tanque pagando un bolívar el litro, que hacerlo a precio internacional”.
Estaciones mixtas
Desde el 8 abril muchas estaciones de servicio fueron catalogadas como “mixtas”, mediante un comunicado oficial por parte de PDVSA. Esto quiere decir que la mitad de los litros que recibe una bomba debe ser vendida de manera subsidiada, y la otra mitad a precio internacional.
Por ejemplo, en un día pueden llegar 9.000 litros, es decir, serían 4.500 litros para ser vendidos subsidiados, pero si en la cola hay 120 vehículos debemos surtir solo 37 litros por cada uno, para ser equitativo, sin embargo, esto no sucede.
“Eso jamás pasa, algunos pueden que lleven 20 litros, otros 40 o 60. Nosotros marcamos la cola, vendemos y vamos viendo como vamos una vez que terminamos, y contabilizamos la cantidad de litros sobrantes para saber a cuántos carros más le podríamos surtir, pero por lo general el número siempre es entre 130 a 150 vehículos”, dijo el encargado de una bomba.
Los 4.500 litros para vender a precio polarizado, nunca se venden, no se forman cola para surtir a 50 centavos de dólar el litro, porque la mayoría no tiene como pagarlos y se ve obligado a pagar la penitencia.
Gabriel Hernández