Las lluvias que azotaron Pekín en los últimos días, con mortíferas inundaciones, fueron las más intensas en 140 años desde el inicio de los registros de las precipitaciones, informó el servicio meteorológico de la capital china, donde se aceleraron este miércoles las operaciones de rescate.
Millones de personas en todo el mundo se han visto afectadas en las últimas semanas por fenómenos meteorológicos extremos y olas de calor, que según los científicos son exacerbados por el cambio climático.
Las precipitaciones, que disminuyeron notablemente este miércoles, comenzaron a caer sobre la gran región de Pekín el sábado. En solo 40 horas, la ciudad vio caer el equivalente a todas las precipitaciones de un mes de julio promedio.
La tormenta Doksuri, que había llegado a ser catalogada como supertifón, barrió el territorio chino de sur a norte después de causar estragos en Filipinas la semana pasada.