Pdvsa ordenó a varias gasolineras cobrar el diésel a 0,50 dólares por litro, igual que la gasolina, reduciendo el subsidio que había permitido a los conductores de transporte público llenar sus tanques a un precio muy bajo.
Parte del transporte público, alimentos y otros productos básicos usan en gran medida el diésel, y los ajustes de precios podrían encarecer los costos de traslados en un país que ya sufre una alta inflación.
En 2021 el precio del diésel en algunas estaciones fue reajustado a 0,50 dólares por litro, pero la revisión no se había ejecutado, de manera que las gasolineras lo ofrecían a precio subvencionado al transporte público y de carga. El acceso al beneficio ha sido engorroso, lo que ha generado largas filas en las estaciones de servicio.
La estatal petrolera poco a poco ha incrementado el número de estaciones de servicios que cobran la gasolina a un precio más alto, aun cuando el suministro de combustible es intermitente.
El Gobierno en 2020 autorizó la verificación del precio de la gasolina y consideró que unas 200 de unas 1.500 estaciones venderían el combustible en divisas. Dos años después ya son al menos 540 las gasolineras que están cobrando en moneda extranjera.