Luis López.- Por más de diez horas se mantuvo un humo denso en todo el aeropuerto, generado por la quema de cauchos y basura en el vertedero de Santa Eduvigis.
Esta situación invadió los espacios en ambos terminales, provocando malestar en los pasajeros y en el personal de las aerolíneas. Las fallas de aire acondicionado y el cierre parcial de las puertas de acceso, hizo más difícil la permanencia en estos lugares.
Miglei Álvarez, agente de tráfico internacional de la aerolínea Laser, hacía esfuerzos para buscar espacios libres del humo. “Es lamentable que se tenga que pasar por esta situación, que no solo afecta a las familias de las comunidades adyacentes, sino que ha convertido estas instalaciones en zonas de alto riesgo para nuestra salud”.
Señaló que “las personas que sufrimos de problemas nasales y de asma se nos hace más difícil permanecer en este lugar, aunado a las fallas de aire acondicionado. Quienes están llevando la peor parte son los niños”.
Mariangely Sánchez, con destino a Maracaibo, dijo que tenía dos horas en el terminal esperando vuelo. “Estoy con mis tres niños y los he colocado bajo el ventilador de la puerta para evitar que se asfixien”.
A pesar de la situación irregular, solo tres funcionarios aeroportuarios, un joven de mantenimiento de la empresa Esplendor y una chequeadora de seguridad de una línea de autobuses, se cubrían con mascarillas.
Lilian Morales y Wilmer Arrollo, trabajadores de una agencia de alquiler de carros, comentaron que era la primera vez que ocurría este incidente, a pesar de los años que tiene el vertedero, ubicado a más de un kilometro de ambos terminales./jd