*Contempla el envío de 2 mil efectivos de la GNB y 600 tropas especiales para “evitar el caos”
El ministro para la Defensa, Vladimir Padrino López, informó que debido a los recientes hechos de violencia registrados en Táchira, el presidente Nicolás Maduro ordenó la activación de la segunda fase del Plan Zamora, la cual contempla el envío de 2.000 efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana y 600 tropas de operaciones especiales.
Destaca que la decisión se toma en el “más estricto apego a la Constitución” así como al “respeto” de los Derechos Humanos (DDHH).
Descartó igualmente que la GNB haya “asesinado” a más de 40 jóvenes estudiantes –en alusión a las muertes ocurridas en el marco de las protestas opositoras– por lo que expresó, en cambio, que estos efectivos castrenses han “cooperado” con el mantenimiento del orden interno utilizando los instrumentos “estandarizados” por la ONU para restituir el orden público.
“No usamos armas de fuego letales, no hay fusiles, no hay pistolas, no hay ametralladoras”, añadió Padrino López, quien además aseguró que los organismos de seguridad, por órdenes del primer mandatario, no hacen uso de perdigones de plástico durante las protestas.
Indicó que las recientes protestas convocadas por la oposición no pueden considerarse manifestaciones porque “cuando hablamos de manifestaciones se supone que es una expresión pacífica y sin armas de gente decente que sale a las calles a gritar sus consignas, su desacuerdo con algunas políticas públicas”, sin embargo, indicó que existe un «accionar subversivo» que busca, dijo, desestabilizar el país y que «está rayando en la fase de una insurgencia armada».
“No se equivoquen”
Instó a los dirigentes opositores que han convocado manifestaciones “a que asuman su responsabilidad de todo lo que está ocurriendo en Venezuela”.
“Les digo a todos aquellos que están provocando la violencia en el país: no se equivoquen porque ya estamos cansados de ver correr sangre en las calles producto de la irresponsabilidad de estos actores políticos que no quieren ver sino una guerra civil entre hermanos”, advirtió el ministro, aunque desestimó que eso suceda.
“Recuerden señores de la violencia, no están jugando solos, están jugando con un gobierno que tiene una fortaleza institucional y moral capaz de hacerle resistencia a todo el daño que le están provocando al pueblo de Venezuela”, agregó.
Mueren otros dos tachirenses
Con el fallecimiento de José Francisco Guerrero, de 15 años de edad y Manuel Castellanos, de 46, aumentó a seis el número de tachirenses muertos en 46 días de protestas.
Guerrero caminaba por el sector Sabaneta a buscar una harina de maíz cuando fue alcanzado por una bala que le entró por la espalda y salió por el abdomen, destrozándole los órganos. Tras dos operaciones, falleció.
Castellanos presuntamente recibió un tiro de fusil cuando funcionarios militares abrieron fuego contra manifestantes en Tucapé, en el municipio Cárdenas. Él tampoco estaba participando en la protesta y se dirigía a comprar pañales para su hijo cuando el proyectil impactó su cuello.
El lunes fallecieron los tachirenses Luis Alviarez (17) y Diego Hernández (32).