Luis López.- En las adyacencias del hospital Alfredo Machado (hospitalito), una paciente que solicitó que no se mencionara su nombre, permanecía recostada en un banco de cemento esperando por un medicamento que le estaba requiriendo su esposo en una farmacia cercana. “Me hicieron un tratamiento intravenoso pero sigo igual. Desde ayer tengo fiebre altísima, pero aquí no hay ni un termómetro para determinar qué tan alta es. Optaré por comprarlo”.
Informó que vive en La Esperanza y acudió a este centro de salud, porque aunque Carayaca le queda más cerca, por lo general no hay medicamentos. “El medico me indicó que me fuera a mi casa pero me siento peor. Prefiero quedarme cerca del hospital por si me complico”.
Informó que le urgía hacerse unos exámenes. “Con el malestar de los huesos, dolor de cabeza, creo que es la chikungunya. Pero serán los exámenes que indicarán si es por una bacteria de un alimento que consumí o la virosis que está en el ambiente”/jd