*Solo un nefrólogo atiende el servicio y no siempre está disponible
Doriana León Ramos
Con dos máquinas paralizadas por falta de mantenimiento y la falta de nefrólogos y enfermeras, los más de 150 pacientes de la unidad de hemodiálisis del hospital José María Vargas, La Guaira, reciben tratamiento en condiciones precarias.
Denunciaron que solo un nefrólogo está a cargo del servicio, pero no siempre se encuentra en la unidad. “Cuando hay una emergencia solamente están los residentes, que aunque son médicos no están especializados y no saben cómo enfrentar el shock de un paciente”.
Reportan que faltan al menos tres enfermeras por sala y las pocas que hay las rotan para cubrir el déficit. “Esto antes no ocurría. Las enfermeras eran exclusivas del servicio porque además con la contaminación que hay en el hospital es delicado que estén circulando por otras áreas y luego se traigan las bacterias en los zapatos”.
Aseguran que aunque no han dejado de recibir el tratamiento de hemodiálisis porque el Seguro Social manda los kits mensuales, falla la aplicación de farmacoterapia para controlar la afección renal.
“Falta la Benutrex y la eritropoyetina que nos la deberían colocar cada vez que recibimos tratamiento, y lo hacen una vez a la semana o cada 15 días, dependiendo de la disponibilidad del fármaco”.
Piden a las autoridades del hospital realizar los enlaces necesarios para aumentar la plantilla de especialistas que puedan garantizar la atención a los pacientes, que cada vez son más por el incumplimiento de tratamiento de diabéticos e hipertensos./jd