“No hay que perder la esencia y la humanidad en la medicina”
La muerte su madre, aquejada por múltiples enfermedades crónicas, fue el motivo más que suficiente para que la doctora María Alejandra Mendoza deseara estudiar medicina, por la cual luchó mucho.
“Desde muy pequeña me apasionaba la medicina y luché muy duro porque mi mamá estaba enferma. Para mí fue fuerte perderla a tan corta edad, tenía 15 años cuando murió, y eso me motivó aún más”, confesó la profesional en medicina general.
Se graduó en el año 2011 en la primera promoción de médicos integrales. Mendoza ha trabajado en el Materno Infantil de Macuto, en el Seguro de La Guaira, en el Periférico de Pariata, en el Hospital Naval Doctor Raúl Perdomo Hurtado, en el CDI del Balneario, en la Clínica Popular Alfredo Machado, en Makro Vargas y actualmente en Nova Neth en Maiquetía.
De presentarse la oportunidad de realizar un postgrado, se iría por la dermatología. Alterna su trabajo con la labor de madre de dos jovencitas, pues como ella misma lo ha dicho “siempre se encuentra el tiempo para compartir con la familia”.
Aconseja a los futuros bachilleres que piensan estudiar medicina a ponerle alma y corazón para alcanzar el objetivo, pero sobre todo, que no pierdan la esencia y su humanidad cuando tengan puestas sus batas de médicos./LDS/jd