Como Aron Javier Castillo Quiñonez, de 11 años de edad, fue identificado el niño venezolano que perdió la vida tras ser arrastrado por una quebrada en Cúcuta, el pasado sábado, cuando intentaba recuperar una de sus cholas que se le había caído al cauce.
Fue la mañana del domingo cuando fue encontrado sin vida enredado entre unas ramas en la quebrada La Tonchalá, ubicada en el barrio La Fortaleza en Cucuta, Colombia.
“Al pequeño se le cayó la cotiza y en su intento por recuperarla cayó al canal de agua. La fuerte corriente que se había formado a pocos metros lo arrastró”, reseñaron medios colombianos.
Se conoció que los vecinos le gritaron al niño, quien además estaba acompañado por su hermana, que no se atreviera a pasar y se quedará en el andén porque el agua se lo podía llevar y el canal no tiene rejillas para evitar que arrastre a alguien. No obstante, el menor no hizo caso y se lanzó a buscarla.
Al conocer el trágico hecho, las autoridades encendieron las alarmas y comenzaron la búsqueda, en la que participaron cerca de 80 miembros de la Unidad para la Gestión del Riesgo, Cruz Roja, Defensa Civil, Bomberos y Policía Metropolitana de Cúcuta, luego de 10 horas de intensa busqueda lograron dar con el cuerpo del menor.
Según fuentes judiciales, el cuerpo fue arrastrado desde el barrio 7 de agosto, pasó a el sector de La Cañada (parte baja), siguió hasta las Torres de Estoraques, Pleno Sol y terminó enredado entre la maleza en La Fortaleza.
Jairo Yáñez, alcalde de Cúcuta, visitó a los padres del niño venezolano para extender su apoyo. El mandatario comentó que se adelantarán campañas pedagógicas en la zona para que los padres no descuiden a sus hijos.