El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció hoy que un grupo de científicos franceses visitará su país para presentar sus investigaciones sobre cómo se puede industrializar la hoja de coca en la medicina.
«Estos días están llegando unos científicos de Francia para plantearnos cómo podemos industrializar (la hoja de coca). No en cocaína, sino en medicamentos», sostuvo el mandatario en un acto para lanzar el «Movimiento hecho en Bolivia» a favor de la industria nacional.
Los científicos «hasta nos han dicho, ojalá que nos demuestren, que la hoja de coca sirve para evitar el cáncer», agregó Morales.
A petición de Morales, científicos cubanos también estudian las potencialidades de la coca para la industria farmacéutica.
Desde que llegó al Gobierno en 2006, Morales, que además es líder de los mayores sindicatos de productores de esa planta, ha impulsado la industrialización de la hoja de coca con fines legales.
No obstante, de momento solo se han desarrollado experiencias industriales menores en la producción de abonos, refrescos, bebidas energizantes, harinas y dentífricos, aparte de la fabricación de infusiones para combatir el «mal de altura» en Bolivia.
La coca, considerada como «hoja sagrada» por indígenas y campesinos de Bolivia, es usada culturalmente y medicinalmente por esos y otros sectores sociales, pero sus alcaloides también son desviados por los narcotraficantes a la fabricación de cocaína.
El mandatario dijo que lamenta mucho que la hoja de coca sea desviada «a un problema ilegal» por los narcotraficantes y ratificó la decisión de su Gobierno de combatir el tráfico de drogas.
Bolivia es, junto a Perú y Colombia, uno de los principales productores mundiales de hoja de coca y su derivado ilegal, la cocaína.