*Las tres sedes en Vargas han pedido ayuda, pero aún no reciben respuestas
Emily González
Desesperado se encuentra el personal de médicos y enfermeras ante el silencio del Ministerio de Salud que no se ha pronunciado por la falta de bolsas y reactivos en los tres bancos de sangre disponibles de la entidad, poniendo en grave peligro a los pacientes que necesitan de una transfusión.
Piden a los entes gubernamentales atender en la brevedad posible la situación. Señalan que aunque cuentan con los donantes, no así con los insumos para las muestras, obligando a los hospitales a trabajar prácticamente con las uñas para atender a la población.
Comentan que se ayudan mutuamente con la poca existencia disponible a fin de sobrellevar la crisis. Las enfermeras resaltaron que las personas acuden a donar, pero sin los químicos para analizar la sangre, deben desecharla porque a los 35 días se vence.
Un familiar de una paciente señaló que el alto costo de los insumos hacen imposible su compra para cualquier persona. “Esperamos respuestas de los entes del estado, que vean las necesidades que tienen los hospitales”./EG