Más de 60 trabajadoras sexuales de los cuatro “burdeles” del estado, deben realizarse un control sanitario cada seis meses
Como parte de las acciones implementadas por la Dirección Estadal de Salud para la prevención de las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), se mantiene un cronograma de supervisión de locales nocturnos y chequeo de salud permanente a las trabajadoras sexuales de las casas de citas autorizadas en el estado.
Así lo informó la coordinadora del programa de ITS-VIH, Ana Román, quien aseguró que junto a la Guardia Nacional mantienen la verificación de la legalidad de los centros. “En Vargas hay cuatro establecimientos legales donde hay trabajadoras sexuales. Estas muchachas, que suman más de 60, están totalmente controladas”.
La funcionaria, señaló que cada seis meses las mujeres acuden al Ambulatorio La Guaira donde se les realiza un chequeo de rutina que incluye la citología, frotis anal, prueba de VIH y VDRL. También reciben las vacunas de toxoide y hepatitis B una vez al año.
Indicó que luego de la evaluación médica, les entregan un carnet de color rosado que las certifica como personas saludables. “Esta documentación debe estar al día en todos los locales, pues de lo contrario son sujetos a sanciones”.
Pacientes con VIH consiguen antiretrovirales sin complicaciones
Román, aseguró que continúan garantizando la dotación de medicamentos antiretrovirales, así como las fórmulas lácteas para recién nacidos a las madres que porten el virus del VIH. A pesar del déficit que han denunciado a nivel nacional algunos pacientes, en el estado se encuentran los principales fármacos recomendados para los pacientes seropositivos.
Actualmente, cuentan con los medicamentos Efavirenz de 600mg, Lamidevine 150mg, Zidovudine 300mg, Reyataz Atazunavir 300mg, Kivexa 900mg, Tenvir, Kaletra, Invinase, Truvada, Valixa 450mg y Videx 400mg.
Aseguran que las pacientes seropositivas que están embarazadas, reciben un tratamiento previo a la cesárea para el nacimiento del bebé. “A las madres con VIH se les aplica una ampolla retroviral y al bebé se le da a ingerir el mismo componente en jarabe. Además, a la paciente se le entrega un kit de bioseguridad para ser utilizado durante la intervención quirúrgica”./DLR/ar/Foto: N.G.