Pablo Giovanny Sivira Martínez (31) era agricultor de El Hoyito, en Tarmas, Carayaca y el pasado martes 17 de abril salió de la casa de su mamá, pero nunca dijo a dónde se dirigía. Iba con su sobrino Andy Alfredo Martínez. Ambos perdieron la vida en el intento de hurto que se registró en la granja de pollos de La Virgencita.
“Se fue con otros más como a las 4:00 de la tarde. El miércoles en la mañana supimos que se habían metido a la granja y que les habían disparado. A mi tía le dijeron que su hijo estaba involucrado y por eso fue que pensamos que mi hermano también estaba allí, pues habían salido juntos”, relata Nancy Martínez, hermana de Sivira Martínez.
Sin embargo, el cuerpo de Andy había aparecido ese mismo miércoles, pero con el de Pablo dieron el pasado domingo, cinco días después del hecho.
“En casa de mi hermano no tenían nada de comer y su niña estaba pasando hambre, por eso tuvo el valor de meterse, aunque era la primera vez que lo hacía”.
Su hermana denuncia que durante tres días recorrieron la granja y el cuerpo de Pablo no estaba donde finalmente fue localizado. “Creemos que lo mataron en otro lado y lo pusieron allí porque sabían que lo estábamos buscando. Eso no puede ser porque lo trataron como un animal”.
El agricultor además de presentar un disparo tenía golpes en la cabeza. “Nos duele, pero su estado no nos permite velarlo”./AT