Menos mal que solo fue un susto
Galvis Guzmán.- El naiguatareño Edgmer Escalona pasó un gran susto, y también los fanáticos de los Tiburones de La Guaira, cuando fue víctima de un batazo de Roudned Odor que se estrelló en su pierna derecha, en el encuentro del día miércoles 17 de diciembre, en el estadio universitario.
Gracias a Dios, la bola pegó encima de la rótula, en la parte muscular, y no produjo afecciones fuertes como fractura o lesiones en ligamentos que pudieran sacar al lanzador varguense de la temporada. El trainer Luna y el doctor Arnaldo Machado lo atendieron con prontitud y a base de tratamientos se ha recuperado y se espera que esté nuevamente en acción este lunes ante Leones del Caracas, para continuar en su orden como abridor./ep