En 10 días se conocerá el veredicto de Guinness, luego de que más de 12.000 músicos venezolanos interpretaran este sábado la Marcha Eslava de Tchaikovsky en un intento por imponer un nuevo récord a la orquesta más grande del mundo.
En el patio de la Academia Militar de Venezuela, en Caracas, se congregaron músicos de todas partes del país, integrantes del Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela, un programa estatal fundado en 1975 por el fallecido maestro José Antonio Abreu que ha dado acceso a educación musical a millares de niños de clases populares.
El Sistema, que ha sido replicado por decenas de países, es cuna de emblemas como Gustavo Dudamel, el director musical de la Ópera de París y la Filarmónica de Los Ángeles.
La obra de Piotr Ilich Tchaikovsky, compuesta en 1876 como himno para inspirar a los soldados rusos y serbios en la guerra con Turquía, fue tercera en el programa de ocho piezas en este concierto.
Durante los 12 minutos que dura la pieza, unos 260 auditores de la firma KPMG observaron que cada músico cumpliera las reglas para imponer el récord, como que no se compartieran instrumentos y que todos tocaran al menos por cinco minutos.
El récord actual fue impuesto en 2019 en San Petersburgo, Rusia, por una orquesta de 8.097 músicos.
El Sistema ya había reunido a más de 10.000 músicos para rendir tributo al maestro Abreu cuando falleció. En aquella ocasión fue imposible certificar el récord por los tiempos y la documentación que exige Guinness.