Médicos y enfermeros dejan los hospitales porque ganan más con una venta de chucherías
El sueldo que percibe el personal médico y de enfermería no es suficiente para cubrir los gastos de transporte, alimentación y aseo personal, es por ello que la mayoría ha decidido desertar para emprender algún negocio, irse a trabajar al sector privado o hasta irse del país, en busca de mejores oportunidades.
En el Seguro Social de La Guaira hay solo 3 enfermeras en el área de emergencia, que reciben el apoyo de 5 estudiantes que les ayudan a atender los casos y aliviar el trabajo, cuando la afluencia de pacientes es mayor. En cirugía trabajan 1 o 2 enfermera en el turno de la mañana y en el de la tarde y por la noche queda una de guardia.
“El personal se va por los salarios, nadie puede vivir con estos ingresos, porque, además, la mitad del sueldo se va en pasajes”, contó una trabajadora.
El Seguro tiene un déficit de dotación desde hace por lo menos 3 años y son los familiares de los pacientes quienes llevan las gasas, los guantes y los insumos que requieren. El área de sala de parto pide 10 pares de guantes y, lo que es peor, no cuenta con ningún tipo de calmante.
El centro tampoco tiene medicamentos para atender emergencias de convulsiones, incluso tuvieron que mandar a reparar un tensiómetro porque ni siquiera tenían uno de repuesto.
Les toca emprender para sobrevivir
El personal tiene que buscar algún emprendimiento para generar ingresos extras y poder sobrevivir. Hay médicos y enfermeros que venden helados en sus hogares, chupetas, caramelos y tortas. “Con eso se ayudan y ganan alguito. Puedes ver a algunos profesionales con larga experiencia, que ahora montan pequeñas bodegas en sus casas y con eso medio resuelven”.
Los familiares de los pacientes mandan a hacer los estudios por fuera
Por su parte, Elva Fernández comentó que el hospital no tiene activos los equipos necesarios para los exámenes de los pacientes, por lo que deben solicitar las órdenes y pagar el servicio por su parte.
“Tampoco tenemos una sala de espera, tenemos que esperar a nuestros familiares sentados en las escaleras del patio de emergencia y nos quedamos expuestos toda la noche. Es como inhumano”. / VC.