El neurocirujano Leopoldo Luque dijo «no ser responsable» de la muerte de Diego Maradona, luego que la justicia argentina allanara su domicilio y el consultorio en búsqueda de pruebas en medio de una investigación con varias aristas.
«El riesgo de Diego era el consumo (de alcohol). Nada se podía hacer sin la voluntad de Diego. No hay un error médico, Diego tuvo un evento fortuito» con el paro cardiaco que le produjo el fallecimiento cuatro días atrás, sostuvo el médico en declaraciones a la prensa en su casa al sur del Gran Buenos Aires.
La justicia argentina ordenó allanamientos en propiedades de Luque tras tomar declaraciones a familiares del ex futbolista, dijo la Fiscalía General de San Isidro en un comunicado.
Luque dijo no saber si estaba imputado por «homicidio culposo» como le atribuye la prensa nacional, en una causa donde también se investiga el «abandono de persona».
Con lágrimas en sus ojos y rodeado de periodistas en el patio de su casa, el médico reiteró que no se reprochaba nada: «No veo culpables por ningún lado. Creo que Diego abandonó la pelea. Estaba muy triste» y no tenía trato con sus hijas.