Obligar a los propietarios de gimnasios a brindar las condiciones mínimas de seguridad a sus clientes es lo que busca la Gobernación de Vargas, que a través de la Procuraduría prepara un decreto que esperan emitir en las próximas horas.
La declaración la realizó el propio procurador, Pedro Rodríguez, quien expresó que la entidad será pionera en materia legislativa, dado que en ninguna otra región del país existe un instrumento similar.
Precisó que para ellos adelantan una jornada de fiscalizaciones en las que participan el Ejecutivo regional, Alcaldía, Sumat, Protección Civil, Bomberos, Contraloría Sanitaria, Inspectoría del Trabajo y demás instituciones relacionadas con la permisología.
“Ya lo hicimos con clínicas, restaurantes y ahora tocó a los gimnasios, debido a la cantidad de denuncias recibidas. Tenemos el caso de La Guaira Sport Gym, que fue cerrado por no contar ni siquiera con un botiquín de primeros auxilios”.
Manifestó que este es el centro de ejercitación más grande del estado, “y aunque sus espacios estaban ideados para 80 personas, tenían más de 330 inscritos”.
Rodríguez reconoció que la medida traerá incomodidad a algunas personas, pero recalcó que lo que buscan es llevar mayor seguridad a los varguenses. “Tenemos 11 gimnasios constituidos y 24 que no están registrados y que funcionan en casa de familias y demás espacios no aptos”.
Reiteró que el llamado a los encargados de estos espacios es a ejercer la actividad económica no solo para lucrarse, sino para brindar las condiciones mínimas de seguridad a sus clientes./AT