Rosa Elena Fuentes (39) murió apuñalada por su esposo Raúl Moreno, en una residencia del Morro II, en San Diego, estado Carabobo tras molestarse porque se fue con su hija a una fiesta en el Club de los Profesores de la Universidad de Carabobo, en La Cumaca y no le informaron nada.
Fuentes, quien era trabajadora de la Alcaldía de San Diego, al parecer era víctima frecuente del maltrato de su pareja. En los últimos tiempos las agresiones verbales habían incrementado, dado que el hombre sufrió un Accidente Cerebro Vascular (ACV), que lo mantenía con la mitad del cuerpo paralizado.
Sin embargo su estado de salud no impidió que cometiera el crimen, luego de que la mujer y su hija llegaran tarde a su casa después de divertirse. En un ataque de ira agarró un cuchillo en la cocina y se fue sobre su víctima, clavándole el arma directamente en el pecho.
Posterior al asesinato, Moreno comenzó a lamentarse, se sentó en la orilla de la cama y lloraba desconsoladamente, repentinamente tomó la decisión de intentar acabar con su vida, por lo que comenzó a cortarse en diferentes partes de su cuerpo, pero no logró lo que quería.
El hombre recibió atención médica, y se encuentra ahora detenido en el comando de la Policía Municipal de San Diego. Según medios locales, la pareja tenían una relación de larga data. Él fue el primer y único novio de la fallecida quien, según vecinos, se dedicó a cuidarlo luego que él enfermara.