Llenos de temor están los residentes de los pueblos que conforman la parroquia Caruao debido a las acentuadas fallas de borde desde Los Caracas hasta Chuspa, registrando alrededor de ocho.
Leonor Sanoja, habitante de Quebrada Seca, informó que ven con gran preocupación como cada la vía se va reduciendo más la vía debido al socavamiento, dejando un solo canal para transitar.
“De seguir así en cualquier momento vamos a quedar incomunicados, sin contar que la falla reparada en el 2011 ya se está dañando porque no quedó como debía. Están gastando un dinero en nada”.
Indicó que cada vez está peor “la curva del motorizado”, llamada así debido a la cantidad de motos que derrapan en el lugar por el desnivel en la vía y el agua empozada, ocasionando el hundimiento de la calle.
“En temporada alta o fines de semana esto es terrible. Los visitantes no saben de la problemática y están expuestos a sufrir un accidente fatal”.
En Osma también se registran alrededor de dos fallas. Allí solo se han dado a la tarea de limpiar la vía cuando se denuncia la situación, señaló Juan Marcano.
“La maleza en ocasiones ayuda a evitar los accidentes cuando los carros se orillan hacia los barrancos. Sin embargo, es peligroso cuando utilizan el canal contrario para esquivar los huecos”.
Para Marina Guzmán la problemática se agrava desde Todasana hasta Chuspa, porque tienen más de ocho años sin asistencia gubernamental.
“Si a duras penas lograr llegar a los pueblos cercanos, a estos que están más lejos ya perdimos la fe. Cuando llueve andamos con el Jesús en la boca porque en cualquier momento no podremos pasar”.LC/jd