Deja un saldo de dos polivargas heridas y cuatro vecinos detenidos. Por segundo día consecutivo se calentaron las calles en la parroquia Maiquetía, donde cientos de personas pedían entre gritos una sola cosa: comida. En esta oportunidad vecinos de Las Ánimas, Guiri-Guiri, El Brillante, Algarín, Cerro de Jesús y Los Claveles, entre otros, trancaron a la altura del elevado exigiendo ser atendidos.
Vale destacar que el lunes los vecinos de El Brillante llevaron a cabo una tranca alrededor de las seis de la tarde, que se extendió por lo menos media hora y se levantó con el ultimátum de que si hoy no les daban respuesta a las cuatro de la tarde trancarían otra vez.
La promesa se cumplió y tomaron de nuevo la avenida principal, pero esta vez acompañados de habitantes del resto de los sectores de ese eje y zonas aledañas que respaldaron a punta de cacerolas. Denunciaron estar cansados del “peloteo y la mentira” de las autoridades, quienes habían dicho que entre lunes y martes serían atendidos.
Sonia Bastardo dijo que “tenemos niños en la comunidad y hace meses que no vemos una bolsa de leche en polvo. Estamos pasando hambre, nuestro niños están sin comer”.
Aura Martínez preguntó en medio de la multitud “¿dónde están las cajas para el pueblo?, porque los bachaqueros sí tienen muchas para revenderlas bien caras, así como hacen en el Cacique donde tienen todos esos productos mexicanos”.
Se amotinaron porque les prometieron la caja para el viernes
Tras la intervención de Pedro Rodríguez, procurador del estado y Sergio Guzmán, jefe civil de la parroquia, quienes informaron que la caja les llegaría el viernes, los ánimos se caldearon a tal punto que Polivargas disparó perdigones y bombas lacrimógenas que fueron respondidas con piedras por parte de los manifestantes.
“Hablamos con ellos y se les explicó la situación. Se llevó una comisión a la fundación Vargas Alimentos, donde se les dijo que no había comida por los momentos, que esperaran hasta el viernes que llegaran las cajas y de inmediato se les haría la entrega”, aseguró Guzmán.
Se pudo conocer que el saldo de esta protesta fue de cuatro detenidos, varios asfixiados y dos funcionarias de Polivargas heridas. La primera de nombre Ismaily Bermúdez, con herida en la cabeza y fue trasladada inconsciente al Periférico de Pariata. La segunda fue María Capote, quien recibió una pedrada en el pie. Ambas son de orden público.
Además se registraron daños materiales de vehículos que se encontraban en la tranca y una moto de la Policía Municipal.
Todo el suceso generó al menos una hora de cola en sentido oeste-este que se extendió hasta pasada la parada de El Trébol.
Debido a que los manifestantes no se quitaban de la vía, se presentaron en el lugar uniformados de la GNB, Policía Municipal y Andrés Goncalves, secretario de Seguridad Ciudadana con su equipo para intentar mediar.
Rodríguez indicó que tiene previsto para hoy una reunión a las 11 de la mañana con un delegado de cada uno de los sectores afectados en las instalaciones de Vargas Alimentos. /jd
María Elena Moreno