Luis López.- Las 300 mil empresas que fueron confiscadas por el Gobierno Nacional desde el año 2007 son improductivas, y en la gran mayoría el personal ha representado un altísimo gasto para el Estado, que ha incidido negativamente en la calidad de los servicios públicos, según lo expresó Eduardo Quintana, presidente de la Cámara de Comercio.
“Es evidente que se afecta la generación de nuevas fuentes de empleo, porque una empresa con personal ocioso y que mantiene el Estado, o que es privada pero no recibe divisas para producir, limita las oportunidades y desmejora las condiciones laborales de los trabajadores”.
Agregó que el poder adquisitivo de la gente es cada vez menor. “Por lo general, recorren tiendas para revisar precios y hacer compras a futuro. Con un sueldo mínimo se les hace imposible cubrir sus necesidades, por el alto costo de los productos”.
Sin llegar productos navideños
Informó que los comercios exhiben algunos productos navideños, pero no necesariamente son de recientes importaciones sino que forman parte del stock de años anteriores. “Para la adquisición de juguetes, aún los importadores están solicitando los permisos de Sencamer o tramitando las divisas. Para el Gobierno no tienen prioridad porque son considerados productos suntuarios, pero inciden en la actividad económica”.
Destacó que las negociaciones siguen estancadas entre el alto Gobierno y el sector empresarial privado. “Si pudieran entender que esta crisis se resuelve con diálogo para sincerar la economía, desde hace tiempo hubiésemos superado esta crisis. Ellos se mantienen con la idea de que sus medidas son las mejores, pero hay que recorrer el país para conocer sus grandes debilidades”.
Expresó que han asumido la economía de puerto a través de las importaciones, pero éstas escasean y la producción nacional es mínima. “Inclusive los pronósticos con la industria petrolera y las empresas de Guayana siguen siendo desalentadores. En 15 años se ha apreciado que no han tenido su mejor desempeño y el país hoy presenta un futuro gris”.//a.r