El líder religioso de clérigo chií, Muqtada al-Sadr, anunció este lunes su retiro definitivo de la política de Irak, lo que provocó un asalto por parte de sus seguidores en el palacio presidencial en Bagdad.
“Había decidido no intervenir en los asuntos políticos, pero ahora anuncio mi retirada definitiva y el cierre de todas las instituciones (sedes) del Bloque Sadrista”, aseguró en un comunicado.
En medio de la tensión en las calles, “el Comando de Operaciones Conjuntas anuncia un toque de queda en la capital, Bagdad, que incluye a los vehículos y a todos los ciudadanos, a partir de las 15.30 hora local (12.30 GMT) de hoy lunes”.
Mustafa al Kazemi, primer ministro iraquí, confirmó en un comunicado la entrada de los manifestantes en el palacio del Gobierno, y ha anunciado la suspensión de las sesiones del Ejecutivo hasta nuevo aviso.
Fuente del Comando de Operaciones Conjuntas de Irak confirmó a Efe que los manifestantes entraron al Palacio Presidencial en la fortificada Zona Verde que alberga las sedes de las principales instituciones del Poder Judicial, incluido el Tribunal Federal Supremo.
El presidente iraquí, Barham Saleh, se reunió con Al Kazemi y los dirigentes del Parlamento y del Poder Judicial para abordar la situación donde anunciaron una nueva sesión esta semana del «diálogo nacional».