El presidente Nicolás Maduro reconoció este miércoles, al intervenir en la Asamblea General de la ONU, la emigración venezolana, que durante mucho tiempo negó, y que, según afirmó, se produjo “por razones económicas”.
“Como consecuencia directa de las medidas coercitivas, unilaterales y de las agresiones económicas impuestas por el gobierno de Estados Unidos a nuestro pueblo se ha producido, coyunturalmente, un proceso de emigración de ciudadanos, fundamentalmente por razones económicas”, afirmó Maduro en una transmisión grabada previamente.
La ONU calcula que más de 5 millones de venezolanos han debido abandonar el país en busca de un futuro mejor. Colombia es la nación que más venezolanos ha recibido, con unos 1,7 millones, según el último dato de las autoridades migratorias. Además, la frontera común era cruzada a diario por unas 35.000 personas antes de la pandemia.
Sin embargo, Maduro aseguró que Venezuela “enfrenta una oleada de retornos voluntarios” que, según cifras oficiales, ronda los 70.000, muchos de los cuales proceden “de países con altísimos niveles de contagio” de Covid-19 como Colombia, Ecuador, Perú, Chile o Brasil.
Ese retorno, en su opinión, está fundamentado en varias razones, entre las que citó “la sistemática violación a los derechos humanos, políticas anacrónicas y xenófobas” contra los migrantes durante la pandemia de Covid-19, que los obligó a volver a su país de origen al quedarse sin empleo y, por tanto, sin recursos económicos.
Maduro se preguntó “cuál ha sido la reacción del mundo que dice preocuparse por Venezuela” ante la situación de los venezolanos en el mundo e insinuó que ha habido corrupción entre quienes se han encargado de atenderlos.
“Nos preguntamos cómo es posible, a pesar de las enormes cantidades de dólares que se han otorgado a estos gobiernos de países receptores de migrantes mediante extravagantes conferencias de captación de donantes para los migrantes venezolanos, qué hicieron con ese dinero”, cuestionó.
“Creemos que hay que revisar con rigurosidad el rol que han venido jugando algunas agencias de Naciones Unidas o algunos personeros de algunas agencias en estos procesos, como la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) o la Organización Internacional de Migraciones (OIM).