María Lourdes Arráez.- Ante las declaraciones del presidente Nicolás Maduro de “planta parada, planta expropiada”, el nuevo secretario regional de la Mesa de la Unidad Democrática asegura que ante el estado en el que se encuentran las plantas que fueron estatizadas, no tiene moral para seguir atacando al sistema productivo nacional.
“El presidente Maduro busca cabalgar el natural resentimiento que existe en la población por el desabastecimiento y bachaqueo, los cuales obedecen a las políticas económicas equivocadas que desarrollo Chávez y que él profundizó”.
Manifiesta que primero debe dar detalles de la situación de las cementeras, cafetaleras, azucareras, Sidor, empresas de aluminio y lácteos Los Andes, todas en manos del Estado.
“Debe explicar por qué las empresas en manos del Estado están en una situación ruinosa y por qué quiere afectar a empresas productivas que carecen de materia prima y de los dólares que controla el Estado. Los empresarios cuentan con bolívares, pero eso no les sirve para comprar materia prima, ni en los países del Alba los aceptan, pues el dólar es la moneda aceptada como unidad de cambio internacional”.
Exige al Gobierno liberar dólares y dejar de hacer tracalería, ya que actualmente solo los reciben a través del amiguismo.
“Quisiéramos ver harina Juana y Venezuela en todos los anaqueles, que muestren la producción de las máquinas procesadoras de maíz que trajeron de Argentina e Irán. El eje industrial parece un cementerio de empresas y galpones porque la política económica ha llevado a cerrar las puertas de 12 mil 700 empresas. El Estado le debe a los productores de maíz y café que les arrimaron sus cosechas”. MLA/ar