El presidente Nicolás Maduro cerró su campaña electoral con la promesa de resolver la crisis económica que ha atravesado el país durante su primer gobierno.
“Llamo desde ya a la paz, al diálogo. Yo voy a convocar a una gran jornada de diálogo nacional para un acuerdo de recuperación económica, de crecimiento económico, de protección de la economía nacional”, dijo desde un acto multitudinario en Caracas, al que asistieron miles de personas.
Explicó que esta propuesta incluirá debates en los 23 estados y la participación de empresarios, representantes de la clase media, partidos políticos, y otros.
“Vamos a hacer un gran diálogo, y para el diálogo hay que aprender a oír, hablar con respeto, yo quiero convertirme en el gran oído de la patria y escuchar las ideas, el clamor, las propuestas de un pueblo que sabe lo que hay que hacer para acabar con las mafias económicas”, sostuvo.
Según el mandatario, unas mafias son las culpables de la hiperinflación y la escasez de alimentos, y medicinas que ha vivido Venezuela durante el último quinquenio.
“Hay muchas cosas que están mal y hay que rectificarlas, no podemos taparnos los ojos y no ver lo que está mal, hay mucha corrupción por ahí regada que hay que acabar y enfrentar, hay mucho burocratismo y mucho burócrata que toma sus decisiones en sus oficinas con aire acondicionado y se olvidan del pueblo”.
El jefe del Estado llamó a los ciudadanos a un gran combate luego de los comicios del 20 de mayo pero antes, dijo, necesita que le den el poder político respaldándole en las urnas.
“Yo llamo a un gran diálogo nacional para darle una gran oportunidad a Venezuela, de un nuevo comienzo, y aprender a hacer las cosas de nuevo para hacerlas mejor, para hacerlas bien, en revolución rumbo al socialismo”, dijo al reiterar su llamado a una mesa de conversaciones con la oposición.