El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, aprovechó la conversación telefónica que tuvo este miércoles con el papa Francisco para invitar al pontífice a realizar una nueva visita al país con mayor número de católicos en el mundo, informó la Presidencia en un comunicado.
“El presidente invitó al Santo Padre a realizar una visita al país y el papa Francisco se comprometió a analizar la invitación y la posibilidad de una visita papal”, según el comunicado.
La invitación fue extendida casi diez años después de la visita que el papa argentino hizo a Brasil en julio de 2013, cuatro meses después de su proclamación como pontífice, para participar en Río de Janeiro de la Jornada Mundial de la Juventud.
Antes de Francisco también visitaron Brasil los papas Juan Pablo II, en 1980, 1991 y 1997 y Benedicto XVI, en 2007.
Según la Presidencia, Lula y el papa tienen prevista una audiencia en el Vaticano en junio o julio de este año como parte de los viajes internacionales realizados por el líder progresista para volver a “colocar a Brasil en el mundo”, tras los cuatro años de relativo aislamiento durante el Gobierno de Jair Bolsonaro (2019-2022).