Rodolfo Ruiz
Ciertamente son edificios muy antiguos los de las urbanizaciones José Antonio Páez, en Catia la Mar y Armando Reverón, Guaracarumbo, en Urimare, por lo que la lluvia y los vientos hacen mella en sus estructuras carcomidas por la humedad y el salitre.
Sus copropietarios hacen un llamado a Protección Civil, a los Bomberos o al Gobernador para que los ayuden a reforzar las estructuras, a impermeabilizar y frisar nuevamente, o les faciliten el material para hacerlos ellos por sus propios medios, pues cada día que pasa es un riesgo para estas familias.
Pudo morir el entrar al bloque 1
Un trozo de concreto casi aplasta a un vecino del bloque 1 de la Páez, Catia la Mar, por que cada vez que llueve o si hay fuertes vientos la estructura del edificio se cae a pedazos.
«Esto es terrible. Aquí podemos morir aplastados niños, ancianos y jóvenes. Hay que estar muy pendientes porque un pedazo de friso que le caiga a alguien lo va a manda para el hospital», expresa un residente.
Manifiesta que las autoridades deben tomar cartas en el asunto, ya que «lo que se desprendió fue de la parte frontal del edificio y es la única entrada y salida».
Indica que los encargados del condominio se niegan a abrir la otra puerta que podría servir como salida de emergencia. «Hemos hablado con la junta y hacen caso omiso, aún sabiendo la gravedad del asunto”.
Pide que se verifiquen la columna de los ascensores. «Es la más deteriorada. Deben realizar una inspección antes de que ocurra una desgracia”.
La humedad del bloque 25
Parte del friso del techo del pasillo del tercer piso del bloque 25, de la urbanización Armando Reverón, Guaracarumbo, se vino abajo a pesar de que han hecho todas las gestiones necesarias para contrarrestar los embates del tiempo.
Los copropietarios están alarmados porque la humedad está haciendo estragos en la estructura y cada vez que llueve los apartamentos superiores se inundan.
Temen que los frisos que se encuentran abombados se terminen de caer y lastimen a algunos de sus residentes. «Pretendemos sacar una tubería aérea para que haya una caída de agua porque la situación se ha agravado», señala Thairis Sanchez, encargada del condominio. RR/jd