La prioridad de la oposición venezolana tras lograr el control del Parlamento debe ser ponerle fin al gobierno de Nicolás Maduro antes de 2019, cuando finaliza su mandato, señaló el encarcelado dirigente Leopoldo López en una entrevista publicada este domingo.
«El primer paso que debemos dar es consolidar el compromiso del liderazgo opositor en cuanto a que Maduro debe salir antes de 2019 y que para lograrlo existen mecanismos constitucionales que podrán ser aplicados de acuerdo con las circunstancias», dijo en un cuestionario respondido desde la prisión militar de Ramo Verde.
Elegido como el «personaje latinoamericano de 2015» por el Grupo de Diarios América (GDA), el dirigente recordó a esa organización que los partidos que conforman la coalición opositora acordaron en julio pasado realizar una «discusión profunda sobre cuál mecanismo activar para lograr el cambio político: si es el revocatorio, la enmienda, la renuncia o la constituyente».
«El mensaje de cambio expresado el 6 de diciembre debe convertirse en mandato popular para el liderazgo político. Si los venezolanos mayoritariamente piden cambio, le tocará al liderazgo definir una ruta pacífica, constitucional y oportuna para lograrlo. Dependiendo de las circunstancias se tendrá que asumir una de las alternativas de cambio en los poderes públicos», sostuvo en la entrevista difundida por El Nacional.
López aludía a las elecciones legislativas del pasado 6 de diciembre, en las que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD, centroderecha) logró una supermayoría de dos tercios de los diputados, tras 16 años de hegemonía chavista.
El fundador del partido Voluntad Popular considera que esa victoria «representa un debilitamiento de la dictadura en la búsqueda de su quiebre definitivo», aunque anotó que el gobierno socialista «aún mantiene secuestrados a los otros poderes del Estado».
«Si Maduro y el resto de las cabezas de los poderes secuestrados por una élite corrupta y antidemocrática torpedean el cambio, pues hay que cambiarlos», subrayó, indicando que sin ello no será posible avanzar en otros frentes como el económico.
López purga una pena de 13 años y nueve meses de cárcel que le fuera impuesta el pasado 10 de septiembre, acusado de incitar a la violencia durante protestas que buscaban presionar la renuncia de Maduro y dejaron 43 muertos y cientos de heridos y detenidos, según cifras oficiales.