El líder de un movimiento de resistencia a los talibanes prometió no rendirse nunca, aunque está abierto a negociar con los nuevos gobernantes de Afganistán, según una entrevista publicada el miércoles por la revista Paris Match.
Ahmad Masud, hijo del legendario comandante rebelde afgano Ahmad Shá Masud, se retiró a su valle natal de Panjshir, al norte de Kabul, junto con el ex vicepresidente Amrullah Saleh.
“Prefiero morir que rendirme”, dijo Masud en su primera entrevista desde que los talibanes tomaron Kabul. “Soy el hijo de Ahmad Shá Masud. La rendición no es una palabra que haga parte de mi vocabulario”, agregó.
Masud afirmó que miles de hombres se están uniendo a su Frente de Resistencia Nacional en el valle de Panjshir, que nunca fue capturado por las fuerzas invasoras soviéticas en 1979, ni por los talibanes durante su primer periodo en el poder, entre 1996 y 2001.
Renovó su petición de apoyo a los líderes extranjeros, incluido el presidente francés Emmanuel Macron, y expresó su amargura por el hecho de que se les haya negado armas poco antes de la caída de Kabul a principios de este mes.
“No puedo olvidar el error histórico cometido por aquellos a los que pedí armas hace apenas 8 días en Kabul”, dijo Masud. “Se negaron. Y esas armas -artillería, helicópteros, tanques de fabricación estadounidense- están hoy en manos de los talibanes”, dijo.
Masud añadió que estaba abierto a hablar con los talibanes y expuso las líneas generales de un posible acuerdo. “Imaginemos que los talibanes acepten respetar los derechos de las mujeres, de las minorías, la democracia, los principios de una sociedad abierta. ¿Por qué no intentar explicarles que estos principios beneficiarían a todos los afganos, incluidos ellos?”.