El martes en la noche se logró la liberación de los dos menores detenidos durante las protestas del lunes, y ayer en la tarde, los cuatro mayores de edad, tres de Guanape y uno de Navarrete.
“Mi hijo nació en Vargas. No estaba protestando cuando fue detenido en Guanape. Es un muchacho sano, estudiante y nunca se ha metido en problemas”, señala Francis Cariel, madre de Frandonys Torribilla, uno de los seis detenidos.
Relata que cuando escucharon a la gente protestando, su hijo salió a buscar a su hermana de catorce años que estaba comprando pan. Cuando llegó al sector los ánimos estaban caldeados, le tiraron una bomba lacrimógena y lo agarraron.
“No voy a tolerar que el Gobernador me lo ponga como terrorista, pues no lo es. Forma parte de una familia que todos los días se levanta preguntándose qué va a comer. Lo he criado con valores y principios y no viene de Caracas ni fue contratado por alguien”.
Cuenta que su hijo estudió en el Fernando Toro, donde participó en todos los actos sociales, fue recreador y actualmente está esperando para entrar en la universidad. Hizo un curso de inglés en el CVA, que no pudo seguir por la situación económica por la que atraviesa la familia.
Yudarlis León, hermana de Yordelis León, detenido en Guanape, asegura que lo que se dijo en las redes sociales sobre los detenidos es falso. “Son muchachos de bajos recursos, estudiantes y sanos. La misma comunidad puede atestiguar que ellos no portaban ningún objeto contundente para hacerle daño a los demás”.
Indica que su hermano había trabajado en la tarde en Macuto y llegó a reunirse con sus compañeros del barrio. “No estaban protestando, se quedaron observando y no cometieron ningún delito”.
Oscar Jaimes, abuelo de Jorneis Jaimes, dice que lo iban a liberar ayer, pero que debía presentar constancia de residencia porque el Gobernador señaló que era de Caracas.
“Mi nieto tiene más de un año viviendo conmigo en Navarrete. Venia a dormir a la casa de su abuela que vive al lado de Manoa, cuando lo interceptó una patrulla y se lo llevó porque estaba protestando”.
Recalca que nadie lo contrató y que ni siquiera estaba cerca de las protestas. Cuenta que Jorneis terminó de estudiar bachillerato e iba a comenzar un curso en el Inces, pero que lo ayuda en los trabajos que realiza. “Es un buen muchacho y nunca se ha metido en problemas”.MLA/jd