Mientras médicos y enfermeras estaban atendiendo a los pacientes de la sala de trauma shock del Hospital Israel Ranuárez Balza, en San Juan de los Morros, parte del techo se desprendió y le cayó encima a uno de los 8 pacientes.
Así lo denunció la presidenta del Colegio de Enfermería del estado Guárico, Petra Malavé. “Parte del techo se ha caído, inhabilitando esta zona que es muy importante para la función de los usuarios que acuden día a día a la emergencia de adultos”.
«Son eventos lamentables que ocurren por la falta de mantenimiento en que están sumergidos la mayoría de los hospitales del país».
“Hubo que desalojar a los pacientes hacia otras áreas del hospital”, agregó malavé, quien detalló que en esa sala se atienden casos como infartos agudos al miocardio, aneurismas, traumatismos encéfalo craneanos graves y shock séptico (infecciones severas).
El 22 de septiembre, familiares de pacientes, representantes de gremios y partidos políticos del estado Guárico, denunciaron la grave crisis de alimentación que atraviesan quienes están internados en este hospital.
“Ahora vemos que a los pacientes que se encuentran en cada una de las unidades de atención, en la mañana les dan una arepa sin ningún tipo de relleno, en el almuerzo en muchas ocasiones les dan pasta sin carne, sin pan, sin jugo, y podemos decir que a veces no hay ni cena. Las condiciones de estas personas son precarias”, indicó a La Patilla, Quintín González, vicepresidente del Colegio de Profesionales de Enfermería de Guárico.
“Con el transcurrir de los años, hemos visto que ha mermado la calidad y cantidad de los alimentos. Hay personas que necesitan comidas específicas de acuerdo a sus patologías de base. Por ejemplo, un diabético necesita una alimentación baja en azúcares, grasas, así como los hipertensos o los niños que están en el área de pediatría, dieta que no se cumple actualmente”, precisó.