Habitantes de la Torre M-15 del urbanismo Hugo Chávez, en Urimare, tienen 8 años lidiando con el hundimiento progresivo de la edificación, hecho que tiene muy preocupadas a las 16 las familias que están viviendo en alto riesgo, debido a las filtraciones y las fracturas que empeoran día a día.
Nurys Arana, asegura que 6 meses después de haberse mudado a la torre cayó una lluvia intensa de 3 horas y allí comenzaron los problemas, la estructura empezó a hundirse.
“La última vez que alguien vino a inspeccionar la problemática fue en diciembre de hace dos años, desde entonces más nadie ha regresado, a pesar de que cada vez que han venido nos dicen que ‘dentro de un mes nos van a solucionar’, pero nada”.
En dos oportunidades, ingenieros enviados por el gobierno, han acudido a inspeccionar el lugar y hasta han realizado los estudios de suelo necesarios, los cuales han determinado que el lugar no es habitable, pero aun así no les han sido adjudicados otros apartamentos a estas familias humildes que están angustiadas, porque no tienen para dónde mudarse.
“Cuando llueve el agua penetra en los apartamentos debido a que el nivel de la torre ha ido bajando, pero termina de llover y a los 5 minutos no hay nada de agua, no sabemos a qué lugar se va. Además, de noche, cuando todo está en silencio, es posible escuchar el crujido de las paredes. Esto es una bomba de tiempo que en cualquier momento puede explotar y ser muchos los muertos o heridos”, dijo Arana.
Sin ventanas y sin puertas
Greisy Pacheco, vive con sus 5 hijos, y comentó que la situación la mantiene alerta las 24 horas, pues sus niños temen en ocasiones de ir al baño debido al mal estado en que este se encuentra. Además, ha tenido que retirar las puertas de las habitaciones debido a que los marcos se han despegado por las fracturas y las ventanas las tumbó el viento.
“El agua corre por las paredes, al igual que por los laterales de los sócates, es decir, estamos propensos a sufrir un corto circuito. Las tuberías de aguas blancas y las residuales están fracturadas, lo que hace que se desborden constantemente y con ello se inundan los apartamentos. Estamos padeciendo un calvario en nuestras propias casas”.
Cada 8 meses regresan las filtraciones
Arsirys Rojas, aseguró que cada 8 meses debe invertir hasta 90 dólares en reparar las paredes, pues las fracturas y filtraciones vuelven, esto debido a que no todos los adjudicados realizan trabajaos de reparación o preventivos y con ello se ven perjudicados los otros apartamentos.
“Ya esta semana vienen a repararme nuevamente las paredes. Muchos han dejado de hacerle arreglos a sus apartamentos porque consideran que es invertir dinero en vano, ya que en menos de un año deben invertir para nuevas reparaciones”.
De igual forma, aseveró que cada 6 meses debe mandar a recortar las puertas, pues el hundimiento de la torre hace imposible que estas abran o cierren sin verse obstaculizadas con el piso.
“Ya casi que la cerradura me está llegando al piso. Es increíble ver como cada día correemos mayor riesgo, pero nada que nos ayudan. 8 años pidiendo una solución que parece jamás llegar ¿Cuánto más debemos esperar?”.
Sin tiempo que perder
Aseveraron que la Gobernación y la Alcaldía no han hecho nada al respecto, pues en reiteradas oportunidades han solicitado su ayuda y ambos entes le manifiestan que es un asunto del Ministerio de Vivienda, que es allá a donde deben acudir.
“Lo único que se les pide es que hagan algo pronto, no queremos que luego existan los lamentos en caso de ocurrir una desgracia. Estoy segura de que si muchos tuviesen otra vivienda ya no estarían acá exponiendo sus vidas y la de sus familias”, puntualizó Arana.
Por: Gabriel Hernández