Luis López – Para José Gregorio Araque y su esposa Jenny Blanco, el único lugar que queda seguro en su vivienda es la sala. “Hemos desocupado las dos habitaciones porque se desplomó una de las columnas y éstas presentan hundimientos. Ni techo digno, Barrio Tricolor o el Jefe Civil han venido por este lugar. Nadie está pendiente de quienes seguimos aquí a pesar de las adversidades”.
Afirma que ha cumplido con todos los censos, pero el sector sigue ocupado por familias que no han tenido respuesta con sus viviendas prometidas. “Viviremos entre el riesgo y la esperanza de que alguien se acuerde que somos pueblo también”, comentó./jd