Un caso de explotación adolescente se registró en Barquisimeto, estado Lara. Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) adscritos a la Brigada de Investigación de Delitos Contra la Violencia de Género, arrestaron a la madre y a la hermana de una adolescente de 15 años por obligarla a acostarse con un hombre por dinero.
Las detenidas fueron identificadas con las iniciales Y.C.C.B., de 37 años, y la hermana mayor de la adolescente, S.Y.C.C., de 19 años.
Ambas obligaban a la menor a que se acostara con su vecino de 50 años, al que le cobraban una cantidad no informada por la policía, para que así ella contribuyera con los gastos de la casa.
Para evitar que la muchacha le contara a alguien la injusticia a la que estaba sometida, madre y hermana le negaban a la quinceañera que tuviera amistades y muchos menos relaciones de pareja con jóvenes de su edad.
Ante tantas restricciones y abusos, la adolescente se negó a seguir cumpliendo con las exigencias que le hacían, pero se suscitó una fuerte discusión, y luego pelearon y resultó lesionada la muchacha abusada.
Se conoció que Y.C.C.B está divorciada del padre de sus dos muchachas, por lo que las 3 vivían solas, y que desde hace algún tiempo no tiene ingresos, por lo que habría decidido ofrecerle servicios sexuales al vecino, quien sí tiene trabajo, vivía solo y podía pagar por sexo.
En las averiguaciones, los funcionarios determinaron que la madre conversaba continuamente con el vecino, y lo invitaba a su casa y le habría hecho la propuesta: “Te doy sexo y tú me ayudas con dinero. Es que estamos muy necesitadas”.
Pero, el vecino, que había visto muy bien a las 3 mujeres, por alguna razón, habría hecho una contrapropuesta:
“Yo puedo pagar, y las 3 son muy bellas, aunque con todo respeto, no quiero contigo, ni con tu hija mayor. Yo estoy dispuesto si es con la más pequeña”.
Y más por hambre que por otra cosa, la mujer desesperada y sin opciones accedió a la petición que involucraba justamente la que no estaba de acuerdo.
Es la consecuencia del drama económico que sufrimos, que deriva en crisis familiar y finalmente se cae en niveles morales muy bajos, en la lucha por la sobrevivencia.
Enterado de la captura de las mujeres, el vecino decidió escapar de la justicia y, supuestamente, se marchó hacia Colombia.
Mientras tanto, la joven víctima quedó bajo el cuidado de un familiar, y las acusadas en manos de la Fiscalía 25º del Ministerio Público del estado Lara.