Tras una alianza científico-campesina, la papa soberana María Bonita, se produce y crece de forma optima para ser cosechada por primera vez fuera de los andes venezolanos en el sector Las Aguadas de La Guaira, gracias al esfuerzo de los trabajadores del campo en la entidad. “María Bonita nació en el páramo y ya tiene su descendencia en La Guaira. Las alianzas entre la ciencia y el campo sigue cosechando triunfos. Seguimos avanzando para garantizar los alimentos, con soberanía”, expresó la ministra de Ciencia y Tecnología, Gabriela Jiménez Ramírez.
Bajo este concepto, para la fecha, esta alianza reproduce en la tierra fértil venezolana, más de 150 variedades de semilla de papa soberana, de las cuales unas 80 son papas nativas de los Andes. Antes era costumbre producir y sembrar papa canadiense.
Jiménez añadió, “lo más importante es que recuperamos sistemas de alimentos con los cuales es posible producir formas de vida más sanas. En Venezuela, no solo trabajamos en el rescate de semillas campesinas, investigamos para recuperar las relaciones comunitarias de nuestro pasado negado. No se trata solo de consumir lo nuestro, sino de cultivarlo de acuerdo con nuestra identidad y nuestra cosmovisión”.
Destacó que estas siembras ya se encuentran en 17 estados del país y cuenta con la participación de más de tres mil quinientas familias productoras del campo.
Este tipo de tubérculo, se caracteriza por ser más resistente a los cambios climáticos y plagas.