Como cada mes los pensionados del Instituto de los Seguros Sociales asistieron al banco a retirar su pensión, 130 bolívares -un equivalente a 4,48 dólares- y que para Eneira De Ruz, solo le sirve para gastos de pasaje.
De Ruz, trabajó y sigue trabajando como docente, aunque fuera de las aulas de clase ya que desde hace 18 años está jubilada. Debido a lo poco que gana con su pensión, tomó como opción dar tareas dirigidas en su casa y es de lo que vive, teniendo una que otra vez la ayuda de sus hijos en el exterior, así como la pensión de su esposo con quien vive.
“Lo de la pensión lo retiro para pagar pasaje eso es para lo que me alcanza”, dice De Ruz quien trabajó más de 20 años como docente, y según cuenta fue con lo que pudo sacar a sus hijos adelante.
En la actualidad, Venezuela lidera la lista de países con pensiones más bajas de Latinoamérica. A pesar de esto, desde el año 2000 hasta el 2006 hubo un incremento de 43.480 a 60.469, pero no es hasta 2012 cuando hubo un importante incremento de las pensiones no contributivas con la misión Amor Mayor, según Convite.
Tal es el caso de Adela Portal, una pensionada a través de Amor Mayor, durante el gobierno del presidente Hugo Chávez. Portal es peruana, pero tiene 50 años en Venezuela, el país que según comenta “le abrió sus puertas con mayores oportunidades”.
Comenzó trabajando acá como empleada domestica y ejercienno otros trabajos informales con el dinero que ganó en sus primeros 20 años en Venezuela pudo construir su casa, donde aún reside en las colinas de Ezequiel Zamora, Catia la Mar.
Actualmente, su pensión le alcanza para gastos básicos, pero no para los alimentarios de los cuales depende de su hija quien tiene una bodega de la que viven ella y su familia. “Mi hija es la que me da mi comida diaria, solo uso la pensión para comprar algunas cosas personales y a veces pan, pero ellos son quienes me ayudan”.
“Yo tengo el techo de mi casa que se está cayendo, con las lluvias eso se ha puesto peor, he buscado ayudar por todos los medios posibles, pero no me dan nada. Ese techo tiene más de 20 años y con la pensión ni cambiarlo puedo”, comentó.
Para los años 2011 y 2012, los adultos mayores recibían un equivalente a $163,99, según comentan algunos “este era el periodo de bonanza”, pero desde ese momento las pensiones comenzaron a decaer y fue hasta 2012 que tuvieron una pensión por más de $100.
Lo que para muchos era su esperanza de subsistencia durante la vejez se convirtió en poco menos de $5 dólares a la fecha, algo con lo que apenas pueden comprar pan y uno o 2 alimentos de la cesta básica, pero deja a un lado gastos de medicinas, subsistencia y otros propios de la vejez.
Por: Génesis Peña