La OTAN cree que las fugas simultáneas de los gasoductos Nord Stream 1 y 2 fueron objeto de “actos de sabotaje deliberados, imprudentes e irresponsables”, por lo que advirtió este jueves que responderá con “determinación” a ataques deliberados contra infraestructuras críticas de los aliados.
“Nosotros, como aliados, nos hemos comprometido a prepararnos, disuadir y defendernos contra el uso coercitivo de la energía y otras tácticas híbridas por parte de actores estatales y no estatales”, indica en una declaración el Consejo del Atlántico Norte.
Agrega que las fugas de gas desde esos conductos “están provocando riesgos para la navegación y daños medioambientales considerables”, por ello, apoyarán las investigaciones en curso para determinar el origen de los daños.
Tanto Estados Unidos como Rusia han calificado de “absurda” cualquier implicación en el presunto sabotaje de esos gasoductos, que llevan gas ruso hacia países del norte de Europa.
El primer Nord Stream, con una capacidad de bombeo de 55.000 millones de metros cúbicos de gas al año, está detenido tras alegar Rusia una fuga de aceite en la única estación compresora que aún estaba en funcionamiento.
El Nord Stream 2 nunca llegó a operar debido al bloqueo por parte de Alemania de la infraestructura antes incluso del inicio en febrero de la invasión rusa de Ucrania. Sin embargo, ambos gasoductos están llenos de gas y deben, por tanto, mantener una presión estable.
Con información de Monitoreamos/Alberto News.