La autopista se ha convertido en una guillotina
El fin de semana la muerte estuvo acechando a quienes transitaban por la autopista Caracas–La Guaira. El sábado, un bebé de apenas 2 años, identificado como Juan Mejías, perdió la vida cuando una camioneta Ford Explorer que iba en sentido a Caracas, perdió el control y cayó al vacío, hecho que, además, dejó otras 4 personas lesionadas.
Se conoció que entre los heridos se encontraba una niña de 11 años, que posteriormente habría muerto. Los demás fueron llevados hasta el Periférico de Pariata donde presentaron traumatismos generalizados y están fuera de peligro.
Por otra parte, el domingo, una unidad de transporte público se volcó cuando transitaba por el kilómetro 0 de la autopista, dejando un total de 21 lesionados.
Estos son los hechos: La buseta, placa AA4809, de color amarillo, presentó desperfectos mecánicos en sus frenos, lo que provocó que su conductor José Carrizo (42) maniobrara para evitar un desastre mayor, se metió en la cuneta y luego la unidad se volteó.
Algunos de los heridos fueron: José Rangel, Juan Caicedo, Neiker Cedeño, Andreína Cedeño y Kenneth Rodríguez; además de 6 menores con edades entre los 5 meses y 8 años.
Asimismo, se conoció que los pasajeros que resultaron ilesos fueron identificados como Petra Carmona, Cora Ramírez, Delnis Umbría, Osmalia Camaño, Josefina Bastidas, Abraham Morales y una niña de 9 años. Funcionarios de Protección Civil, Bomberos de Distrito Capital y la Guardia Nacional de Seguridad Vial acudieron al lugar de los hechos, trasladando a los lesionados hasta el Hospital Pérez Carreño de la ciudad de Caracas.
Ante estos hechos registrados en los últimos días en la autopista Caracas – La guaira y la avenida Carlos Soublette, los ciudadanos piden que se ejecuten medidas drásticas para disminuir la incidencia de choques, volcamientos e incendios de vehículos.
“Las autoridades regionales y nacionales deben mejorar las condiciones viales, con el fin de garantizar la seguridad de todos”, opinaron quienes temen que los accidentes continúen ocurriendo y cobrando la vida de más guaireños.