Valerie Calderón
La Casa de Reposo La Abuelita, en Caraballeda, no recibe alimentos suficientes para que los 40 pacientes recluidos puedan recibir sus comidas todos los días, por lo que el personal debe pedir créditos a bodegas o sus familiares tienen que llevar donaciones.
Anteriormente el centro solo atendía a pacientes geriátricos, pero en la actualidad el 80% de las personas hospitalizadas son pacientes psiquiátricos crónicos, no necesariamente ancianos, pues el grupo predominante es de 40 a 60 años.
“Estos últimos años han sido muy difíciles por la situación económica del país, hemos tenido varias crisis con los alimentos y los salarios de los trabajadores”, explicó el médico psiquiatra Francisco Rivero.
Este tipo de centros de reposo en realidad son clínicas privadas. A nivel nacional hay 100 de ellas y atienden pacientes que están financiados por el Seguro Social, es decir, que ellos pagan una cuota mensual por cada uno para que la clínica le garantice el hospedaje, limpieza y atención médica y psiquiátrica.
“La clínica depende de ese pago, en años anteriores la suma era importante y daba para mantener el sitio en buen estado, había personal abundante y buen remunerado, pero de 5 años para acá ha habido un bajón”.
Solo perciben $3 por cada paciente
El personal se ha ido porque no recibe un buen salario y no le queda más opción que buscar otro trabajo con mejor sueldo y así poder cubrir sus necesidades, el doctor añadió que les ha tocado trabajar con el poco personal, solo cuentan con 2 médicos generales, 1 psiquiatra y 21 trabajadores, entre esos enfermeras, camareras y personal de mantenimiento.
En el año 2019, el Seguro Social asumió el suministro de alimentos, por lo que mensualmente llega un camión que lleva proteínas, vegetales, algunas bolsas con alimentos secos como harina de maíz, pasta y arroz, “pero desde que inició la pandemia esos camiones llegan con menor cantidad y no alcanza para fin de mes”, es allí cuando los familiares empiezan a recaudar fondos y buscar donativos para conseguir comida, “¿cómo garantizamos medicina, atención y comida por solo 3 dólares al mes? Es imposible”.
El centro necesita que la cuota sea aumentada porque están entrando en un colapso, incluso muchas clínicas a nivel nacional están pensando en que no pueden seguir funcionando debido a la crítica situación.