El peleador mexicano fue suspendido indefinidamente por la Comisión Atlética del Estado de Nevada (NSAC) y la Comisión de Boxeo y MMA de Arizona, debido a su negativa a realizarse una prueba de detección de drogas antes de su pelea contra Daniel Jacobs el pasado diciembre.
El extitular del peso mediano estaba preparado para pelear contra Jacobs en Las Vegas pero al no presentar su examen fue suspendido. Chávez apeló y recibió la orden judicial de un tribunal que levantó esta suspensión de la comisión lo que permitió que la pelea se realizara en Phoenix, donde Jacobs lo derrotó en cinco episodios. Pero ahora un juez se puso del lado del NSAC volviendo a rigor la suspensión, por lo que el peleador tendrá que explicar sus acciones.
Chávez Jr. dio positivo por sustancias prohibidas dos veces, una por un diurético en 2009 y otra de marihuana en 2012.