Josefina Santos, de 31 años, quien reside en el urbanismo Mare Abajo II, Urimare, con sus tres hijos menores de edad, denunció que su expareja, Carlos Wladimir Díaz Gutiérrez, de 32 años, con quien tuvo una relación sentimental por 2 años y quien presuntamente la maltrataba verbal y físicamente, quiere desalojarla del apartamento que ella heredó de su madre fallecimiento en diciembre.
Santos señaló que su expareja pretende sacarla de allí a la fuerza porque ella tiene 2 apartamentos y que él debería quedarse con uno porque no tiene dónde vivir.
“Efectivamente tengo uno en el Urbanismo Hugo Chávez, Urimare, porque me lo entregaron por haber estado refugiada por mucho tiempo, pero el de Mare Abajo II también es mío porque que mi mamá falleció y por ser única hija lo heredo legalmente”.
Después que se murió su mamá, Santos llevó a Díaz al apartamento de Mare Abajo porque mantenían una relación amorosa, pero como ella es comerciante y salía a muy altas horas de la noche no se quedaba frecuentemente con él debido que no había transporte para el sector.
“Le descubrí que me era infiel en mi propio apartamento de Mare. Tenían viviendo un año y medio en la casa de mi madre, por eso decidí dejarlo”.
Al pedirle que se fuera, Carlos Díaz hizo una llamada y a los pocos minutos se presentó Elvica López, secretaria del alcalde Suárez, quien es tía de Carlos, y le exigió a Santos que desalojara.
“Como me negué a salir de mi casa, estas personas se fueron, pero a los días siguientes me cambiaron la cerradura en 4 oportunidades, pero por ser mi casa yo entraba. Fue en ese momento cuando mi expareja me apretó por el cuello y con un trapo en la mano me pegó en el rostro, para que me doliera y no quedaran rastros”.
Josefina Santos revela que lo denunció ante el Ministerio Público y el fiscal de guardia le entregó una medida de protección. “Ninguno de ellos se me pueden acercar a menos de 100 metros”.
Ha recibido amenazas por parte de Carlos Díaz, quien se vale del cargo que tiene su tía, quien ha llevado a varios funcionarios municipales.
“Entre ellos estaba uno de alto rango que me decía que debía desalojar”.
“Luego de Carnaval recibí una llamada de la directora de Hábitat y Vivienda. Fui hasta su oficina, me atendió amablemente y me dijo que le explicara por qué tenía dos apartamentos del gobierno. Dijo que podía reunirme con el viceministro para ver que estaba sucediendo”.
La directora me señaló que no tenía problema en ofertar cualquiera de los dos apartamentos que están cancelados, pero a través de la Inmobiliaria Nacional, como lo dicta el documento que nos entregan y de acuerdo a la ley.
“Le hago un llamado al Fiscal General de la República, Tarek William Saab; al Ministro de Habitat y Vivienda, Ildemaro Moisés Villarroel Arismendi, para que me ayuden. No pueden permitir, ni yo tampoco que me quiten lo que es mío”.IM/jd