*Hace 30 años creó una marca que se dedica al patrocinio de deportistas
Wilmer Martínez Añez.- wmlaverdad@gmail.com.- A los 12 años José Nobrega hizo su primera tabla de surf como resultado del interés por este deporte, que sin duda lo acompañará hasta el final de sus días, así lo manifiesta. Desde muy pequeño aprendió de su padre todo lo referente con esta tarea.
Nobrega es licenciado en Aeronáutica y se desempeña como mecánico de aviones en los hangares de la aerolínea Aserca, lugar desde donde concedió ésta entrevista, para exponer un poco lo que ha sido su vida desde que aprendió a elaborar estas tablas.
Se perfeccionó en Brasil
En el año 95 se fue a Brasil a visitar sus abuelas y aprovechó perfeccionar sus conocimientos en lo que hasta ahora no ha dejado de hacer, por ser una de las tareas que cumple con amor y entusiasmo. Un año después, regresa a Venezuela para seguir impulsando la marca Nobrega, pero esta vez dictando talleres.
Ya con 30 años desde que arrancó su empresa, se mantiene en la promoción de varios deportistas para que crezcan en la práctica de su desempeño, como es el caso de los surfistas Rubén Cedeño y Joel Castro. Pero no todos sus beneficiarios se dedican al surf. José Cuervo, practicante de apnea en la región, recibe patrocinio de Nobrega.
Su conocimiento ha cruzado fronteras
El conocimiento que ha adquirido y luego impartido ha cruzado las fronteras, pues algunos de sus alumnos se encuentran en otros países cumpliendo con la función que él realiza en el estado, bien sea elaborando tablas o surfeando, y hasta explicando cómo hacer ambas.
“Mi primo Víctor Nobrega se fue para Italia y se encuentra dictando talleres con todo el conocimiento que adquirió a través de mí”. También están otros jóvenes en el estado con el legado, como Adrián Brea, residenciado en Las Tunitas y muy interesado en elaborar y reparar las tablas.
Padre de dos menores
Ya hace siete años que se casó con su actual pareja. Juntos educan a dos menores, una niña de 16 años y un varón que hace tres meses llegó a la vida de este amante del surf.
Cuando joven, Nobrega fue apodado “Snoopy” por una joven que gustaba de él cuando estudiaba en diversificado. “Ella comenzó a decirme así porque me consideraba tierno y atento. Hasta donde supe gustaba de mí”. Este apodo lo ha mantenido con el pasar de los años y asegura que así seguirá porque todos lo conocen por ese sobrenombre.
Elaboración de una tabla
El proceso para crear una tabla de surf dura una semana y requiere de fibra, telas, poliuretano y resina de poliéster, más toda la pintura o decoraciones que alguno desean colocarle. Se puede elegir una tabla dura o liviana.
Nobrega realiza estas tareas en su casa, que utiliza como taller y aula de clase, ubicada en Las Tunitas, Catia la Mar, donde vive con su familia y dicta los talleres a esos jóvenes. Esta labor, asegura, no la dejará de hacer porque es algo que lleva en el alma.
Los precios de las reparaciones básicas oscilan entre los 500 y dos mil bolívares, dependiente del tipo de daño que sufra la tabla. “Los que más se daña son los astilleros, los niveles y estillones, esto por los golpes que reciben con las piedras, olas del mar y cuando las trasladan en los carros”.
Indica que el precio para elaborar una tabla puede superar los Bs. 90 mil, no sólo por el trabajo que requiere confeccionarla, sino por los materiales. Nobrega aprovecha para decirle a los deportistas que se esfuercen por ser mejor cada día y así obtener buenos frutos en el mañana.WMA/jd