José Maita logró lo que se propuso: hacer la marca mínima

El extraordinario mediofondista anzoatiguense, José Maita, cumplió con lo que se trazó desde principios de junio: ganar su cupo a los Juegos Olímpicos París 2024 por motus propio, sin depender de ranking.

Eso se produjo, este sábado, en la remozada pista del estadio Brigido Iriarte, luego del “carrerón” que protagonizó, en los 800 metros planos en la jornada final del Campeonato Nacional Adulto de atletismo, cuyo resultado hizo explotar, una algarabía general, en todos los espacios del coso capitalino, liderada por su familia, con la celebración colectiva por la marca agenciada (1´44”57) que rebajó por 13 centésimas la mínima exigida por la World Athletic.

Una marca que lo mete en la historia, no solo por alcanzar su primera participación en Juegos Olímpicos y ser el 30 en la delegación criolla, sino que lo convirtió, si la memoria no nos falla o si las estadísticas no lo niegan, en la mejor marca que se ha hecho en este recinto deportivo y el segundo atleta del país que baja de 1´45” en esta prueba, siendo el otro, el caraqueño William Wuyke, que fue parte de los que presenciaron el acontecimiento.

“No quería contar con el ranking y los puntos para obtener el cupo, por lo inestable y la presión que eso significaba, gracias a Dios se pudo lograr el objetivo, también agradezco el apoyo de mi entrenador (César Martínez), mi familia y del Ministerio del deporte. Esto es una alegría y emoción muy grande, haber alcanzado la marca con mi familia en las gradas apoyándome”, expresó el nativo de El Tigre, una vez concluída la carrera.

Ante la presencia de Wuyke señaló: “Es una persona a quien admiro. Récord nacional (1´43”54-1986). Uno de los más duros de Venezuela (38 años). Espero que haya José Maita para rato y mi meta es tumbarlo en uno o dos años, donde espero que también esté presente”.

La carrera de Maita fue todo un espectáculo, desde que sonó el disparo de salida. Su desplazamiento fueron con fuerza, siguiendo los pasos de un compañero con funciones de liebre, el cual lo ayudó mucho, haciendo un parcial en los 500 metros (extraoficial) de 1´16 y unos 600 en 1´30” para que luego se empleara a fondo con su acostumbrado remate en los últimos 150, entrando con mucha disposición en el levantamiento de rodillas, a los 100, cronometrado por algunos en tribuna en 13 segundos.

Habla el entrenador César Martínez:

“Estoy complacido con el plan de preparación que hicimos en Colombia, estuvimos dos veces. No fue fácil. Viajamos con nuestros recursos, aunque después nos lo reconocieron el Ministerio del Deporte. Y teníamos muchas expectativas más aún con las marcas recientes mundialistas en esa prueba”.

“Se cumplió con el objetivo que nos trazamos en colombia. Fue un trabajo de concentración, de preparación, de alimentación, el cual diseñé yo mismo”.

“Para París, nuestros planes es llegar a la final. Hemos hablado en muchas oportunidades ese tema.Y esas carreras cuando las haces con un grupo fuerte de atletas, tienen muchas variantes, bien sea por la cantidad que va en punta, se puede producir tropiezos. Siempre le digo que correr un 800 así debe asumirlo como montarse en un riel”.

“La diferencia está en la última parte y él esta preparado para eso. Los últimos 150 metros son decisivos y en los entrenamientos nos enfocamos en hacerlo los más rápidos posibles”.

La dupla exitosa de los  800 metros: José Maita y César Martínez, aspiran hacer un plan de entrenamiento de choque en España para tratar de llegar en las condiciones idóneas a la cita olímpica**.**/G.G.