Jorge Valero: Ahora es cuando hay chavismo y revolución
“El chavismo es una esperanza del pueblo empoderado que defenderá con absoluta determinación los logros humanistas de la Revolución Bolivariana”.
Tal afirmación fue hecha por el embajador Jorge Valero, representante permanente de Venezuela ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) con sede en Ginebra.
El diplomático venezolano señaló que el chavismo cuenta con un pueblo organizado, “que se crece ante las dificultades y, como piedra diamantina, irradia esperanza en tierra patria y allende los mares”; mientras que la oposición “es una sopa de letras, incoherente e inorgánica, sin proyecto político alternativo. Es por eso la oposición no ha podido, siquiera, celebrar el resultado electoral”.
Indicó que en las recientes elecciones parlamentarias el voto opositor se nutrió -circunstancialmente-, del descontento provocado por la inhumana guerra económica promovida por la contrarrevolución: “Ese voto no es producto del liderazgo de esos candidatos sin arraigo popular alguno, la mayoría de ellos desconocidos por sus electores”.
Aseguró que en la votación opositora ha convergido “una masa incorpórea (en buena parte confundida por la guerra sicológica), que, como la levadura, bajará hasta desvanecerse, y más aún, si el sector fascista y proimperialista intenta desmantelar el Estado democrático de derecho y de justicia plasmado en la Constitución Bolivariana”.
El embajador Valero expresó que los voceros opositores no deberían asumir que todos los que votaron por su opción son antichavistas, fascistas o proimperialistas, ni mucho menos que respaldan cualquier pretensión de extirpar –como ya lo han anunciado-, el proceso justiciero y libertario que inició el Comandante Presidente Hugo Chávez Frías, y que continúa el Presidente Nicolás Maduro Moros.
Precisó que como parte de la infame campaña mediática internacional alentada por el Imperio contra Venezuela, algunos de sus crematísticos lacayos foráneos se hicieron presentes en el país, intentando enlodar el prestigio de nuestra sólida institucionalidad democrática.
“En estas elecciones parlamentarias se ha demostrado que nuestro sistema electoral es autónomo y confiable, como lo reconociera el expresidente Jimmy Carter, quien lo calificara como el mejor sistema de votación del mundo”, dijo Valero.
“Los acompañantes internacionales, incluyendo la misión de UNASUR, encabezada por el expresidente Leonel Fernández, así como cientos de observadores, han mostrado admiración y reconocido la pulcritud y transparencia de nuestro sistema electoral”, observó el diplomático bolivariano.
“Por contraste, los alicaídos viudos del neoliberalismo, que con bombos y platillos invitó a nuestro país la oposición, han guardado un bochornoso silencio ante el impecable desempeño de nuestro sistema electoral”, agregó.
Chavismo y revolución para rato
Valero manifestó que el chavismo cuenta “con millones de voluntades que están preparadas para defender la obra y el legado de nuestro líder histórico, Hugo Chávez Frías”.
“Que no se equivoquen nuevamente. Si pretendieran interrumpir el devenir democrático de la Venezuela bolivariana y sus conquistas, se encontrarían con un pueblo que reaccionará con más fuerza, con más contundencia, que como lo hiciera ante el Golpe de Estado de abril de 2002”, subrayó Valero.
Nicolás Maduro: Ejemplo de talante democrático
El representante permanente de Venezuela ante la ONU Ginebra indicó que el Presidente Nicolás Maduro ha dado un ejemplo de talante democrático al reconocer, en forma inmediata y sin vacilaciones, el resultado electoral.
“El Jefe de Estado actuó de la misma manera que cuando el Comandante Presidente Hugo Chávez reconoció la victoria opositora en el referendo por la Reforma Constitucional de 2007”, añadió.
Valero enfatizó que los máximos líderes del chavismo han reconocido, con hidalguía, honor y valiente espíritu autocrítico, los resultados adversos.
“Los insensatos líderes de la oposición, por el contrario, no han reconocido ninguna de las 18 victorias electorales chavistas. Aún seguimos esperando que presenten las pruebas que dijeron tener de supuestos fraudes”, puntualizó.
El embajador señaló: “Debemos sentir orgullo y admiración por la vocación pacífica y la inquebrantable voluntad democrática de nuestro pueblo, que ejerció su derecho al voto con civismo, y sin incidentes relevantes que lamentar”.
Asimismo elogió la extraordinaria labor del Consejo Nacional Electoral, y muy especialmente, de su Presidenta, Tibisay Lucena, durante este proceso eleccionario, lo que reafirma la incuestionable capacidad ética y moral, así como el profesionalismo del máximo ente comicial venezolano.
Acotó el diplomático bolivariano que también debe resaltarse la patriótica actuación de nuestra Fuerza Armada Nacional: “Reconocemos el relevante papel desempeñado por nuestra institución castrense, que en el marco del Plan República, liderado por el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, se desplegó por todo el país, garantizando que el proceso electoral transcurriera en un ambiente de paz y armonía entre los venezolanos y venezolanas”.
Los pueblos del mundo no se rinden
El embajador Jorge Valero fue claro al destacar que los movimientos progresistas del planeta han tomado plena conciencia del constante asedio de las fuerzas imperialistas sobre la democracia participativa venezolana, que está a la vanguardia de la revolución mundial, y el cual se ha evidenciado, una vez más, en esta campaña electoral.
Estimó que este evento comicial será un punto de inflexión que abrirá nuevas oportunidades para que avance -con mucha más fuerza y vigor-, la lucha que une a Nuestra América y a los países del Sur, en favor de la especie humana y la Pacha Mama.
“Lejos de traducirse en desasosiego y frustración, estamos seguros de que esta consulta electoral ha fortalecido el espíritu fraterno de las fuerzas revolucionarias progresistas y socialistas que buscan horizontes de libertad, justicia y solidaridad en el orbe”, aseveró.
Valero reiteró que la Revolución Bolivariana, iniciada por Hugo Chávez Frías y hoy liderada por Nicolás Maduro, seguirá simbolizando las irrenunciables aspiraciones de los pobres y excluidos del mundo.
“El chavismo es un pueblo, un ideal de redención humana que no se rinde, que ha trascendido fronteras, y que hoy más que nunca continuará en su marcha indetenible contra las fuerzas hegemónicas que no cesan en su afán de extinguir la llama de esperanza que Venezuela representa para las naciones del Sur”, sentenció.